Jarabe De Palo

¡yep!

¡Yep, yep .!

¡Yep, yep .!

Vi pasar la vida entera por delante de mí .
cargada de razones buenas para estar contento, para ser feliz.
Pero estaba tan jodido que me gritó ¡yep! y no me moví,
tirado en el sofá de casa no encontré motivos.

¡Yep, yep .! Gritaba la vida y no respondí .
¡Yep, yep .! Gritaba que el mundo era para mí .
¡Yep, yep .! Quería que fuera algo más feliz .
¡Yep, yep .! y yo no podía .

Vivía con poco . de nada me faltaba,
tenía bastante y lo demás, que más me daba.
Y sin saber qué me ocurría .
perdí las ganas de seguir, de perdurar, de sonreír.

Volvió a pasar la vida y esta vez respondí .
me puse en primera fila y al escuchar ¡yep! por fin entendí
que me sobraban los motivos para estar contento, para estar feliz.
De nuevo aposté por la vida, a pesar de todo,
. ¡claro que sí!

¡Yep, yep .! Gritaba la vida por verme así .
¡Yep, yep .! Gritaba tan alto que comprendí .
¡Yep, yep .! que el mundo estaba hecho para mí .
¡Yep, yep .! La vida sigue .

¡Yep, yep .! La vida sigue .
¡Yep, yep .! La vida sigue . ¡claro que sí!
¡Yep, yep .! La vida sigue .