Una barca en el puerto me espera
no sé donde me ha de llevar
no ando buscando grandeza
sólo ésta tristeza deseo curar.
Me marcho y no pienso en la vuelta
tampoco me apena lo que dejo atrás
sólo sé que lo que me queda
en un solo bolsillo lo puedo llevar.
Me siento en casa en América
en Antigua quisiera morir
parecido me ocurre con Ãfrica
Asilah, Essauira y el Riff
Pero allá donde voy
me llaman el extranjero
donde quiera que estoy
el extranjero me siento.
También, extraño en mi tierra
aunque la quiera de verdad
pero mi corazón me aconseja
los nacionalismos, ¡Qué miedo me dan!
Ni patria, ni bandera
ni raza, ni condición
ni lÃmites, ni fronteras,
extranjero soy.
Pero allá donde voy
me llaman el extranjero
donde quiera que estoy
el extranjero me siento.
no sé donde me ha de llevar
no ando buscando grandeza
sólo ésta tristeza deseo curar.
Me marcho y no pienso en la vuelta
tampoco me apena lo que dejo atrás
sólo sé que lo que me queda
en un solo bolsillo lo puedo llevar.
Me siento en casa en América
en Antigua quisiera morir
parecido me ocurre con Ãfrica
Asilah, Essauira y el Riff
Pero allá donde voy
me llaman el extranjero
donde quiera que estoy
el extranjero me siento.
También, extraño en mi tierra
aunque la quiera de verdad
pero mi corazón me aconseja
los nacionalismos, ¡Qué miedo me dan!
Ni patria, ni bandera
ni raza, ni condición
ni lÃmites, ni fronteras,
extranjero soy.
Pero allá donde voy
me llaman el extranjero
donde quiera que estoy
el extranjero me siento.