Habla,
no te quedes sin voz.
Puedes,
tener la solución.
Te lo digo a ti, mi voz callada.
No quieras dormir, puedes gritar.
Dentro,
estalló el corazón.
Fuera,
no se entera ni dios.
Sentimientos que
se van quedando en el silencio derrotados.
Palabras sin fe,
sin libertad.
Yo quiero sentir
el alma en mi voz.
Decir lo que al viento le conté
y en mí se quedó.
Sentir que mi sangre
rompe los silencios,
cuando son las dudas, las heridas
que nos cierran los miedos por dentro.
Tengo
tantas cosas que dar.
El tiempo
nunca espera, se va.
Para ti de mí,
con la tristeza acostumbrada de otros tiempos.
¿Por qué hay que sufrir?
Puedes gritar.
Yo quiero sentir
el alma en mi voz.
Decir lo que al viento le conté
y en mí se quedó.
Sentir que mi sangre
rompe los silencios,
cuando son las dudas, las heridas
que nos cierran los miedos por dentro.
Por que esperar sin más,
ver los días venir sin afrontar.
Barriendo, escondiendo todo el mal
bajo los suspiros sin sanar.
Yo voy a sentir
el alma en mi voz.
Decir lo que al viento le conté
y en mí se quedó.
Sentir que mi sangre
rompe los silencios,
cuando son las dudas, las heridas
que nos cierran los miedos por dentro.
Habla, no te quedes sin voz...
no te quedes sin voz.
Puedes,
tener la solución.
Te lo digo a ti, mi voz callada.
No quieras dormir, puedes gritar.
Dentro,
estalló el corazón.
Fuera,
no se entera ni dios.
Sentimientos que
se van quedando en el silencio derrotados.
Palabras sin fe,
sin libertad.
Yo quiero sentir
el alma en mi voz.
Decir lo que al viento le conté
y en mí se quedó.
Sentir que mi sangre
rompe los silencios,
cuando son las dudas, las heridas
que nos cierran los miedos por dentro.
Tengo
tantas cosas que dar.
El tiempo
nunca espera, se va.
Para ti de mí,
con la tristeza acostumbrada de otros tiempos.
¿Por qué hay que sufrir?
Puedes gritar.
Yo quiero sentir
el alma en mi voz.
Decir lo que al viento le conté
y en mí se quedó.
Sentir que mi sangre
rompe los silencios,
cuando son las dudas, las heridas
que nos cierran los miedos por dentro.
Por que esperar sin más,
ver los días venir sin afrontar.
Barriendo, escondiendo todo el mal
bajo los suspiros sin sanar.
Yo voy a sentir
el alma en mi voz.
Decir lo que al viento le conté
y en mí se quedó.
Sentir que mi sangre
rompe los silencios,
cuando son las dudas, las heridas
que nos cierran los miedos por dentro.
Habla, no te quedes sin voz...